Seleccionar página

Todos somos Líderes porque todos hemos tenido momentos de liderazgo. Esta es una idea muy interesante para ser conversada.

Nadie debe ser líder de todos, todo el tiempo… ¿sería una autocracia? ¿dictadura? ¿tiranía?, no lo sé, pero no sería algo conveniente.

La característica del liderazgo es que se separa del cargo. El gerente posee el cargo, el líder posee el reconocimiento de la gente. Se puede ser gerente sin ser líder, se puede ser líder sin ser gerente; el reto de estos días es que todo gerente también sea líder, por momentos.

El gerente es gerente de todos pero el líder solo de una porción de personas; de aquellas que lo validan.

Una de las distinciones que manejo en mis tres libros y 30 años trabajando el tema, es el carácter “rotativo” del liderazgo. Debe cambiar de manos constantemente y depende de la combinación entre talentos y exigencias del momento.

Por lo tanto, el liderazgo del que hablo se vive por momentos y cuando así lo entendemos, se abren muchas posibilidades.

En el primero de mis libros, «Todos somos Líderes», desarrollo esta idea que desmitifica como si fuera un fenómeno reservado para pocos. Si todos somos líderes, significa que yo lo soy y tú también.

El liderazgo se vive por momentos, esa no es una idea original. Muchos autores ya han hecho referencia.

Lo que sí es reciente, que planteo en mi libro y no he encontrado algo parecido en la literatura que conozco es identificar esos momentos y ponerle nombre.

En múltiples confrontaciones y análisis de situaciones, junto con mi equipo de expertos de Forja Consultores, llegamos a identificarlos y son cinco.

Sí, son cinco los momentos de liderazgo, y cuando los tenemos claros podemos vivirlos plenamente, y desde esa consciencia, podemos vivirlos mas seguidos.

Aunque en el libro están mas profusamente explicados, los voy a mencionar brevemente y estoy seguro que te identificarás con ellos. Estoy seguro también que los has vivido en situaciones tal vez efímeras, cortas y posiblemente con pocas personas, pero eso, no le quita el valor.

Uno de los momentos surge cuando en medio de una situación cualquiera tú u otra persona lanza una idea que modifica por completo la continuidad de lo planeado. A lo mejor iban a la playa y alguien comenta que mejor es ir a la montaña por “x” razón y el plan cambia. A lo mejor, en otra situación, un grupo de personas estaba desanimado y de repente te levantas y dices algo que modifica por completo el estatus del grupo. A este momento lo llamo Abrir Posibilidades.

Otro momento que se vive con frecuencia es el de dar el primero paso. A veces hace falta esa persona que rompa con la inercia, se levanta y comience a “hacer”. En ese comenzar, el resto se levanta y lo sigue. Era necesario Iniciar. Así llamo a este otro momento.

Un tercer momento, sin orden alguno, es el de Entusiasmar. A lo mejor alguien abrió una posibilidad, luego otra persona dio el primer paso e inició, pues siempre hará falta el que emocione y anime al grupo para mantenerse en movimiento. Entusiasmar es contagiar y llenar de vida al colectivo cercano.

Lo más frecuente es que estemos en medio de gente diversa en intereses y motivaciones, es más, es lo deseable. No podemos lograr grandes cosas con gente que siempre está de acuerdo o que son sumisas. Integrar y mantener unido al grupo a fin de obtener la mayor sinergia posible. Integrar es otro de los momentos de liderazgo. Cuando por una intervención tuya logras alinear las energías y fuerzas para ir tras un propósito común.

Una de las más poderosas manifestaciones de liderazgo que he encontrado es cuando quien está contigo se siente valioso, querido, tomado en cuenta, importante. No vas a admirar a quien te maltrata o humilla. Por simple oposición, estás a gusto con aquella persona que te hace sentir empoderada. Esa persona que te reconoce, te agradece, te entrena y apuesta a ti. En ese momento, cuando logras Empoderar a alguien, estás viviendo un momento de liderazgo.

Si ocupas una posición gerencial, parte de tu papel es estimular que estos momentos sean vividos o protagonizados por tu gente. No eres tu quien debe ejecutarlos siempre, la idea que apoyes, estimules y, sobre todo, reconozcas cuando alguien lo asume.

Cinco momentos que no tienen orden ni tienen que estar todos presentes en una misma situación. La idea en este escrito es que los conozcas y te veas a ti mismo en qué momentos usas uno u otro.

Ese es el camino, la auto observación.

¿Captaste la idea del título de este escrito? Nadie debe ser líder de todos, todo el tiempo.

Coméntame, ¿te resulta práctico este enfoque de liderazgo y sus momentos?

Los cinco momentos de liderazgo es uno de los grandes contenidos del PLIO.

Programa de Liderazgo e Influencia OnLine.

Para saber más visita www.forja.com